Mi opinión sobre ‘los terribles dos’
Todos los padres y madres hemos oído hablar de los famosos terribles dos años. Algunos les temen, otros logran sobrellevarlos con humor, unos se vuelven locos y a otros quizás hasta pareciera que les pasan desapercibidos.
Little Monster acaba de cumplirlos la semana pasada, aunque desde hace algunos meses viene anunciando su llegada. ¿Cómo? Con travesuras que me toman completamente por sorpresa, por supuesto. No es nada que otros niños no hayan hecho, pero al ser madre primeriza todo es para mí algo completamente nuevo y diferente.
Honestamente siempre he pensado que los terribles dos son solo un mito o broma de los padres o madres experimentados para espantar a los papás y mamás primerizos. Aún pienso que son una especie de mito, pero comienzo a darme cuenta que tienen algo de cierto.
Y no es porque los niños se transformen en pequeños diablillos de la noche a la mañana. Creo que simplemente es parte de su desarrollo, de cómo van conociendo el mundo que los rodea y experimentando con cada objeto que ven a su paso. Es verdad que esa experimentación puede en ocasiones ser demasiado intensa y termina con la destrucción o daño de algunas cosas, pero como lo mencioné antes, creo que todo es parte de ese desarrollo necesario y natural de los niños.
Por supuesto que no hay que permitirles hacer todo, pero es importante tener algo siempre muy claro: SON NIÑOS. Ellos aún no conocen ni pueden entender completamente que para cada acción corresponde una reacción. Que si aplastan el bote de crema, explota por todos lados. Que si pintan con el labial de mamá en vez de los crayones, mamá se molesta. Que si agita como loquita su vaso de agua moja todo el piso y se hace un desastre.
Debo confesar que la parte más difícil para mí es al momento de descubrir a Little Monster haciendo travesuras. Y es que cada vez que eso sucede le digo con una falsa y exagerada expresión de sorpresa: “¡¿Qué pasó?!”, a lo que ella responde levantando sus manos y poniendo cara de “no sé de qué me hablas”, lo que me provoca demasiada risa por la manera en cómo reacciona. Cuando hace esta clase de travesuras me cuesta mucho trabajo regañarla porque me gana la risa y debo fingir que estoy molesta por lo que hizo.
Y tú, ¿has padecido los terribles 2? ¿También quieres corregir a tus hijos pero te gana la risa? ¡Comparte tu experiencia en comentarios!
Imagen destacada de Donnie Ray Jones
Justo tengo un borrador estacionado sobre esto. Y no son un mito, ojalá. Acá se pasaron rápido los berrinches.
También tenia este post en pausa desde hace unas semanas, es el mal de las blogueras jaja
Espero se pasen pronto, aunque la mayoría del tiempo mi hija es muy tranquila.
Todo lo que dices es verdad; ES UN MITO, en agosto bebesaurio cumple tres y como dice Daniela, también lo tengo en borrador jajaja muy buen post Mamá Millennial (Y)
Jajaja gracias amiga, no se me han hecho tan terribles, me hace reír mucho esta niña jajaja gracias por comentar, besos!
El terrible two es cierto, sí!! Y mi peque de dos y medio hace poco me hizo lo mismo con el pintalabios jajajajjaa vaya tela!!
Algo tienen los labiales que les atraen tanto jajaja gracias por comentar!